"Otra más a la lista..."
Esto es lo mejor que se puede decir después de correr la Media Maratón de Trujillo y no por la carrera, ni por la organización, si no por la desmotivación con la que la afronté.
Después del 10km de Talavera y la última media de Monfragüe en las que conseguí alcanzar los "tiempos objetivo" del año, noto cierta desmotivación ya que Sevilla aún lo veo muy lejos y ando dando tumbos, buscando nuevos retos a corto plazo para volver a entrenar con ilusión.
Con estas me presenté en Trujillo junto con un numeroso grupo de corredores del club "Fondistas Moralos" para correr la I Media Maratón de Trujillo que organizaba la empresa Gamonal Eventos.
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| Que buena gente hay en esto de correr |
Una mañana fría con apenas 4º y amenaza de lluvia no invita a quedarse medio desnudo para correr, pero entre el exceso de café y las risas que te echas mientras te cambias, cuando te quieres dar cuenta ya estas calentando.
A las 10:30 daban la salida por lo que aproveché para hacerme una foto con uno de los grandes de esto de correr, Miguel Gamonal, campeón de España de maratón :
También estaba Abel Antón, pero no me enteré de su presencia hasta que venia de vuelta en el coche y no puede conseguir una foto de recuerdo. Otra vez habrá oportunidad seguro.
Después de toda esta parafernalia social y mitómana nos dirigimos al arco de salida. No tenía pensado salir a morir en esta carrera y dudé en quedarme un poco más atrás, pero siguiendo a unos y a otros sin darme cuenta estaba casi en "pole position", mi mejor posición de salida de todos los tiempos.
Pistoletazo de salida con mucha gente animando y como siempre "estampida", bueno, en este caso "mini" y es que creo que el final de la prueba, que acababa con 4km de subida con un desnivel del 8%, hacia estar a la gente temerosa y reservona a la hora de consumir imnecesariamente energías.
Los primeros km eran por las calles del pueblo y me los tomé como calentamiento, las sensaciones eran malísimas, como si llevara una losa encima, bien es verdad que había dormido poquísimo, pero no creo que esa fuera la causa principal.
Salimos de Trujillo dirección al pueblo vecino de Huertas de Animas. En las calles había un gran ambiente con la gente aplaudiendo y animando. Antes de salir de Trujillo nos empezamos a cruzar con los corredores de la carrera paralela de 6.5km. En ese punto es cuando me doy cuenta que debo ser gilipollas, porque de nuevo se me ha olvidado el gel energético con lo que el bajón que llevaba se hace sideral. Mi primer pensamiento es tomarme la carrera como un entrenamiento y llegar a las subidas en la mejor condición para no pasar demasiado sufrimiento y es que no se si los geles harán algo pero yo tengo demasiada dependencia psicológica y si no los tomo sobre el km 18 me aparece una sensación de mini-muro que me hace no disfrutar de las carreras.
Una vez pasado el pueblo de Huertas entramos en un polígono industrial, para mi la parte más fea de la carrera. Aquí, en el km 7 encontramos la primera cuesta, preludio de lo que iba a ser la carrera que no es otra cosa que un continuo sube y baja constante sin ninguna zona donde poder coger ritmo.
Salida del polígono y acceso a la vía de servicio de la autovía A5, este será el terreno por el que discurrirá la carrera hasta casi el km 17. Es en este punto donde decido buscar un grupo en el que refugiarme y que me marque el ritmo y he aquí que diviso las camisetillas amarillas de los compañeros jaraiceños de lanchacabrera que como ya indiqué en otro post son auténticos diapasones de ritmo en carrera, así que a ellos me engancho.
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| Me encantan las cuestas. Puuuffff. |
Sin más incidencia en carrera, salvo algún corredor pasado de ritmo y pagando las consecuencias, llegamos al final de los tovoganes de la vía de servicio entrando en una zona que me sorprendió por no estar habituado a verlo y no es otra que una zona de pedregales, lo que los teóricos llaman zona técnica y que como no vayas atento, la zona técnica te deja el tobillo como una pelota de tenis. Lo malo es que esta zona es la de recuperación antes de las subidas y entre unas cosas y otras no acabas de coger el aire necesario.
En el km 18 empezaba mi via crucis particular y es que es ver una cuesta y entrarme un temblor de piernas que me vengo abajo, así que me mentalicé que pasase lo que pasase no iba a andar en ningún momento. La primera cuesta era un camino de cemento con una pendiente considerable y de 1km de longitud, donde no había ni un metro de recuperación y donde peor lo pasé de la carrera. Al final de esta cuesta estaba de nuevo el pueblo de Huertas donde tomamos una carretera de asfalto con unos 200m de ligero descenso y que continuaba con otra cuesta de aproximadamente 1.2km. Esta última subida no se me hizo tan dura e incluso en ella adelante a bastantes corredores que pagaban el esfuerzo. En los últimos metros, como siempre, con el animo de la gente pude cuadrar la figura y entrar en la plaza de Trujillo disfrutando el momento.
Las sensaciones finales no fueron tan malas como inicialmente pintaban e incluso cuando acabé empece a pensar en las siguientes carreras por lo que creo que ha sido solo una época mala y que con buenos entrenos volverá la ilusión y si no a Sevilla a comer pescaito y beber rebujitos.
Próxima carrera 10km DE NAVALMORAL DE LA MATA - 1 de diciembre de 2013...
Canción recomendada :
¡¡Nos vemos en los caminos!!
